La pandemia de COVID-19 ha afectado fuertemente el sector de esparcimiento, sobre todo los clubes en todo el mundo. Duras medidas de confinamiento y reducción de aforos han socavado la vida nocturna y con ello los ingresos de estos negocios.
Pero ha habido una noticia que debería ser música para los oídos de los propietarios de clubes alemanes. Y es que un tribunal del país ha declarado que el tecno es música, dando a los clubes la misma exención fiscal que disfrutan las salas de conciertos.
En un caso en el tribunal superior financiero con sede en Múnich, varios demandantes, incluido el legendario club Berghain en Berlín, argumentaron que no deberían tener que pagar la tasa completa de IVA. Los clubes han estado pagando el 19% de IVA, mientras que las salas de conciertos en Alemania han disfrutado de una tasa reducida del 7%.
El Tribunal Federal dictaminó que la tarifa reducida en las salas de conciertos no se debió necesariamente a la presencia de músicos y cantantes, sino a la razón principal por la que asiste el visitante promedio.
Los DJs también son músicos
“Los DJs no solo tocan portadores de sonido (compuestos por otros), sino que interpretan sus propias piezas musicales utilizando instrumentos en el sentido más amplio, para crear secuencias de sonido con su propio carácter”, detalló la corte.
Y declaró que incluso si los ingresos de las bebidas son más altos que los de las entradas, los «clubbers» vienen principalmente por la música.
Pero el cierre de clubes en Alemania, particularmente en Berlín, desde hace más de seis meses ha sido un desastre para el sector, y se espera que algunas empresas no sobrevivan. La reputación de la ciudad como la capital de la vida nocturna y la música tecno sirve como un imán cada año para decenas de miles de turistas jóvenes de todo el mundo.
